En un post anterior te mostramos las ventajas y desventajas de los geles y las barritas energéticas. Por su utilidad a nivel práctico y nutricional, son dos de las opciones más utilizadas en el ciclismo para ir reponiendo fuerzas mientras se anda en bici. Esto no quiere decir que no haya otra manera de alimentarse para seguir dando pedales. Las posibilidades son infinitas, pero quizás no tan idóneas como los geles y las barritas energéticas. A ver qué te parecen las siguientes sugerencias:
Alternativas a los geles
Si no te gustan los geles por su envase, porque te resultan difíciles de tomar en marcha o porque te dejan los dedos y el maillot pegajosos, puedes hacer tus propios geles y meterlos en bolsas de plástico o bidones flexibles como te contamos aquí.
Bebidas energéticas en polvo compradas o preparadas en casa. Las compradas son la tercera opción más usada después de geles y barritas porque son muy convenientes gracias al formato (bote y sobre) y la mezcla de carbohidratos. Los sobres son muy útiles para recargar en distancias largas, aunque también puedes llenar bolsitas de plástico con el polvo de los botes. La otra opción es comprar maltodextrina, fructosa y sal a granel para hacer tu propia bebida sin sabor dulce.
El plátano es el alimento ideal para andar en bici por su valor nutricional y porque ya viene con un envoltorio biodegradable. Si lo quieres en formato gel, hazlo puré, mételo en una bolsita exprimible para niños y ya tienes un gel de plátano. Otra opción es una patata cocida hecha puré (machaca la patata pelada y añade agua de la cocción poco a poco para conseguir una textura líquida pero cremosa). Pon el puré dentro de una bolsita exprimible y tendrás un gel salado que aporta una buena dosis de carbohidratos y se digiere fácilmente. Para quien sufra “cheese addiction” una sugerencia: pequeñas cuñas de queso crema machacadas y mezcladas con plátano.
Los dátiles sin hueso y otras frutas desecadas los puedes hidratar y hacer puré también.
Gominolas, caramelos blandos, bloques de gelatina y cualquier otro tipo de golosina que puedas llevar en una bolsita, que no requiera masticar mucho y que no se derrita con el calor.
Mantequilla de cacahuete o de otro fruto seco en sobres exprimibles como estos. No contienen tantos carbohidratos como un gel, pero son muy prácticos. Lo mismo que la leche condensada, la crema de cacao tipo Nutella en tubos, sobrecitos de miel o de sirope de arce.
Como opciones menos dulces, además del puré de patata, tienes purés vegetales y smoothies a base de fruta y otros ingredientes.
Alternativas a las barritas
Plátanos, dátiles sin hueso, higos secos, ciruelas pasas sin hueso, frutos secos tostados o naturales… son alimentos sencillos y saludables, tanto si los comes sin procesar como si haces barritas caseras como la que tienes aquí o estas otras tres. Para transportarlos y comerlos sin procesar, usa bolsitas de plástico. En ellas también puedes llevar patata cocida en rodajas.
Los pastelitos de arroz son una opción muy interesante nutricionalmente. Por eso forman parte de las bolsas de avituallamiento en el ciclismo profesional. En este otro post te contamos cómo hacer la versión básica, una salada, otra dulce y cómo envolverlos para comerlos fácilmente en la bici.
Dentro de los dulces, bollería y golosinas hay un sinfín de alternativas, caseras o compradas, aunque la mayoría no son muy “saludables”: P&B sandwich, stroopwafels, gofres, barras de chocolate (Snickers, Kitkat, Mars, Bounty…), galletas… Busca que sean fáciles de masticar y sobre todo de digerir. Cuanta más grasa, proteína y fibra tengan, más lento será el vaciado gástrico y la absorción de los carbohidratos, pudiendo generar problemas gastrointestinales. Piensa también en el calor (el exterior y el que generamos al andar en bici) para no llevar en el maillot algo que se derrita o ablande fácilmente.
Comida salada como un sandwich de pavo, jamón y/o queso, pretzels, crackers salados, meat sticks, carne deshidratada, snacks de queso (Babybel, mini quesos italianos, cheddar…) e incluso una tortilla de maíz rellena y bien envuelta puede servir. Al igual que en los dulces, algunos alimentos no son la mejor opción cuando damos pedales. Tenemos la excusa de que estamos quemando calorías, pero tómalos con moderación, elige los que se comen y digieren con más facilidad, que no se derritan y, si no traen envoltorio, protégelos bien con papel de aluminio o transparente para no terminar con el maillot lleno de comida.
Seguramente haya más opciones, tantas como costumbres gastronómicas a lo largo y ancho del mundo. Si a ello le sumamos el gusto personal, las alergias e intolerancias, y que, lo que a un ciclista le sienta bien a otro le puede generar problemas, al final la única manera de saber si un gel, una barrita o alguna de sus alternativas te funciona es probando para ver que pasa. Eso si, no lo hagas el día importante. Entrena tu sistema digestivo antes y piensa que la gran mayoría de las opciones que te hemos contado no son convenientes en una competición o evento deportivo. Cuando hay intensidad, velocidad y tensión, los geles y las barritas superan a cualquier alternativa.